Museu de Ciències Naturals de Barcelona

Consejo de Niños del Museu

El NAT Quienes somos Museo y sociedad Consejo de Niños del Museu

Este nuevo órgano asesor —formado por 16 niños y niñas de quinto y sexto de primaria de las escuelas Els Porxos y Els Horts del distrito de Sant Martí— se constituyó el 25 de octubre de 2014.

consell infants

Primer Consell d’Infants del Museu 

El Consejo de Niños actuará como equipo asesor respecto al funcionamiento del espacio, los contenidos y las actividades del Museo.

El Museo de Ciencias Naturales de Barcelona desea que el Consejo de Niños del Museu sea:

  • Un órgano de participación real que permita que sus opiniones, ideas y sugerencias referentes a todas las actividades del Museo sean escuchadas.
  • Un consejo asesor del Museo experto en infancia que disfrute de la misma consideración que cualquier otro de los consejos asesores con que los cuenta el Museo.
  • Un espacio de debate y encuentro que posibilite el feedback Museo-niños.
  • Una herramienta educativa para las escuelas que promueva el valor educativo de la participación.
  • Un instrumento para plantear mejoras en el Museo, de cuya consulta, en la medida de lo posible, deben salir propuestas ejecutables, visibles y finalistas.
  • Un órgano al que consultar acerca de cualquier aspecto del Museo, por lo que el Museo le otorgará un protagonismo real, no únicamente formal.

Estructura y funcionamiento

Estructura

  • Está formado por niños y niñas (paritariamente) de las escuelas Els Porxos y Els Horts del distrito de Sant Martí de Barcelona. Ambas escuelas están cerca del Museu, lo que facilita la visita y las reuniones y, además, este proyecto está incluido dentro del proyecto de proximidad que se desarrolla con el distrito de Sant Martí. Asegurar la participación de dos escuelas diferentes fomenta una mayor riqueza y diversidad de experiencias.
  • El primer consejo contará únicamente con niños del ciclo superior de primaria (quinto y sexto cursos) para facilitar la gestión. Se iniciará con un consejo de 16 miembros, aunque no se descarta la posibilidad de ir ampliando su número ni ampliar asimismo la franja de edad a medida que el proyecto se desarrolle.
  • El tiempo máximo de permanencia en el consejo será de dos años. La experiencia del Parque de las Ciencias de Granada permite pensar que los niños pueden querer seguir vinculados al Museo, por lo que puede crearse un club de ex consejeros o un consejo de adolescentes y jóvenes a fin de que los niños que quieran continuar vinculados al Museo puedan hacerlo y así no pierdan el contacto con la institución.
  • Se procurará que dentro del consejo haya miembros de diferentes procedencias y niveles socioculturales, así como algún niño o niña con alguna diversidad funcional física. La diversidad nos permitirá tener un punto de vista más rico.

Funcionamiento

  • Se dará libertad a las escuelas para que elijan a los niños y niñas miembros del consejo de la manera que consideren más oportuna. No obstante, desde el Museo se fundamenta la idea de que sean escogidos por sorteo entre todos los niños. Si el niño o niña elegido no quiere ser miembro del consejo tiene libertad de renunciar a su elección. Elegir por sorteo genera un mayor compromiso y sentido de la responsabilidad en los niños porque son conscientes de acceder al cargo por casualidad, que el azar ha hecho que puedan ser miembros del consejo y que tienen que demostrar que son merecedores del cargo.
  • La experiencia del consejo es y debe ser totalmente diferente a la escolar. Los miembros del consejo no están obligados a tomar notas, realizar redacciones, ni dar su opinión si no quieren.
  • Los consejeros no tienen que ser portavoces de sus escuelas o de sus familias sino que son representantes de sus propias opiniones. Podríamos decir que son expertos en infancia y son elegidos por esta razón.
  • Los miembros del consejo recibirán la convocatoria de reunión en su casa, acompañada del acta de la reunión anterior y con el orden del día a tratar en la siguiente sesión. Esta convocatoria también la recibirán los maestros de la escuela.
  • Las reuniones no deben distar mucho unas de otras para mantener una dinámica de trabajo activa y eficaz. A principios del curso escolar se determinará el periodo de trabajo del consejo agrupando las sesiones en un cuatrimestre (por ejemplo, una sesión mensual de octubre a enero o de febrero a mayo). Dichas sesiones tendrán una duración aproximada de una hora y se realizarán en horario lectivo escolar.
  • Los únicos adultos que asistirán a las reuniones del consejo serán el dinamizador y el secretario encargado de tomar nota y realizar las actas. La directora del Museo, como impulsora del consejo, podrá asistir siempre al consejo a instancia del mismo o por iniciativa propia. La limitación de la asistencia de adultos tiene como objetivo posibilitar una participación más espontánea, natural y creativa que la que generalmente se da cuando intervienen adultos.
  • Las decisiones no se tomarán por votación. El Consejo de Niños del Museo no ha de ser un consejo representativo, tal y como se entiende tradicionalmente, sino participativo. Las ideas buenas e innovadoras son escasas y si los niños y niñas votan de manera democrática siempre se aprueban las propuestas menos sugerentes, las más comunes y ordinarias, las más parecidas al pensamiento de los adultos. Por consiguiente, el papel de la persona dinamizadora es clave para poder captar las opiniones reales de los niños.
  • Se tendrá en cuenta la posibilidad de crear grupos de trabajo dentro del consejo.
  • El consejo podrá convocar reuniones extraordinarias si sus miembros lo consideran conveniente.

Documentos de interés:

Convención Internacional sobre los derechos de los niños

Informe Consejo de Niños del Museu

Acta del Consejo del 25 de octubre de 2014

Acta del Consejo del 25 de noviembre de 2015